Astroturismo

Tres lugares extremeños, entre los mejores de España para ver las estrellas

La Fundación Starlight determina que Extremadura es uno de los mejores destinos turísticos para disfrutar del firmamento

Vía Láctea en el Paraje Natural de Los Barruecos.

Vía Láctea en el Paraje Natural de Los Barruecos. / JUAN JOSÉ VENTURA

Valverde de Leganés ha sido la última localidad en unirse a los sitios más idóneos de España para disfrutar del firmamento. Así lo ha determinado la Fundación Starlight al incluirlo en su lista de destinos turísticos, una distinción otorgada a lugares con cualidades excelentes para contemplar las estrellas.

La localidad pacense se suma así a espacios como la comarca de Las Hurdes, que ingresó en la lista en 2021, y a Monfragüe, el primero en obtener esta distinción en 2016. Los tres se convierten de este modo en un punto de encuentro para el astroturismo, un ejemplo de desarrollo sostenible basado en un recurso natural inagotable: el cielo. La escasa contaminación lumínica, el número de días despejados y la calidad y transparencia del aire son factores clave que convierten a estos espacios extremeños en puntos idílicos para los amantes de la astronomía.

Los destinos turísticos Starlight necesitan contar con tres zonas diferenciadas:

  • Zona núcleo: espacio donde se mantienen intactas las condiciones de iluminación natural y nitidez del cielo nocturno.
  • Zona de amortiguamiento: constituye el ámbito de protección que envuelve a la zona núcleo ante los posibles efectos adversos que puedan deteriorar la calidad del cielo nocturno. Estas pueden incluir pequeños asentamientos humanos y áreas de actividad. Se considera zona de amortiguamiento o zona de alta sensibilidad al ámbito próximo que posea visión directa sobre la zona anterior.
  • Zona externa o de ámbito general: se trata, ocasionalmente,  del área de uso general donde se encuentran los asentamientos poblacionales que pueden influir en la evolución de la calidad del cielo nocturno del conjunto del destino turístico.

No obstante, la distinción no sólo supone una garantía en cuanto a la calidad de sus cielos. Los espacios recogidos como destinos Starlight, además, deben contar con los medios para garantizar su protección, así como con las infraestructuras y actividades necesarias para el desarrollo de actividades turísticas y su integración de manera sostenible en la naturaleza nocturna.

El astroturismo, una actividad en auge

La observación del firmamento nocturno es una práctica que se remonta a la antigüedad, cuando las estrellas constituían uno de las pocos métodos con los que contaba el hombre para guiarse en sus viajes. Pese a que estas prácticas han quedado en su mayoría en desuso, la contemplación de los diferentes elementos del cielo nocturno se mantienen a día de hoy vivos en aficionados a la astronomía.

Este astroturismo es una modalidad de turismo sostenible y responsable que explota el cielo nocturno como recuro natural. Su práctica promueve la protección de la calidad del aire, impulsa la astronomía como actividad cultural y genera recursos económicos derivados de sus actividades.

Los espacios rurales son los principales beneficiarios económicos del desarrollo de las actividades propias del astroturismo. Su poca densidad poblacional contribuye a una escasa contaminación lumínica y los convierte en un enclaves astronómicos, todo un reclamo para turistas dispuestos a viajar a los lugares más óptimos para disfrutar de la observación de la bóveda celeste.

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