Luz verde a la primera socimi de vivienda asequible de 'lucro limitado'

Luz verde a la primera housing association española. La plataforma Alas Vivienda Asequible lanzará en las próximas semanas una socimi pionera especializada en proveer de vivienda en alquiler asequible, que nace con 1.442 pisos en 16 promociones ubicadas en Cataluña y Comunidad de Madrid construidos sobre suelos propiedad de la istración públicas y con la ambición de casi duplicar esta cifra en los próximos tres años.

La socimi, que tendrá el nombre Alas Invest, está previsto que inicie a final de año los trámites para debutar en bolsa. Por el momento, la compañía cuenta con fondos propios aportados por sus socios fundadores para afrontar la adquisición del 80% de este casi millar y medio de inmuebles de nueva construcción. Sin embargo, la vocación del vehículo es tener un carácter abierto y seguir creciendo a través de ampliaciones de capital, con la vista puesta en alcanzar las 2.500 viviendas bajo gestión en 2028, encontrándose ahora en situación de fundraising (levantamiento de fondos).

Las primeras 1.442 inmuebles han sido adquiridos a la Fundació Salas, organización sin ánimo de lucro que las ha promovido y las venderá a precio de coste una vez se logren los permisos requeridos en este tipo de operaciones. Precisamente, Manel Rodríguez, socio y consejero delegado del Grupo Salas y patrón honorífico de Fundació Salas, será presidente ejecutivo de Alas Invest y es socio fundador de Alas Vivienda Asequible de la mano de Alejandra Mora, directiva con una larga trayectoria en el sector residencial en compañías como Azora o Tectum y especialista en vivienda asequible, que ocupará el cargo de directora general.

El millar y medio de pisos forman parte de la cartera de adjudicaciones públicas que ha logrado la fundación catalana Salas en los últimos meses y cuyas obras terminarán entre 2025 y 2026: 12 promociones y 1.011 viviendas están localizadas en diferentes municipios de la Comunidad de Madrid, que proveen del Plan Vive, concurso de colaboración público-privada en el que la istración regional pone terrenos a disposición de inversores privados para construir inmuebles que sean alquilados a precios por debajo de mercado; mientras los cuatro edificios restantes están en varias localidades de Cataluña y suman 431 casas.

Objetivo, preservar vivienda a largo plazo que se alquilen a precios asequibles

El objetivo de este vehículo —frente a un fondo que compra promociones en alquiler—, es preservar vivienda a largo plazo sin el objetivo de acabar vendiéndola en mercado, como los vehículos cerrados. "Vamos a financiar la construcción de vivienda y vamos a operarla a largo plazo con el objetivo de obtener un lucro limitado: tendremos un retorno financiero, pero también otro social medible", explicó Alejandra Mora este martes, en un desayuno informativo en la capital. La idea es que la socimi Alas Invest obtenga un beneficio "recurrente, seguro y moderado" derivado del alquiler de las viviendas, cuyos precios estarán 'topados' y regulados por la istración que haya cedido el suelo, aunque una parte de este será reinvertido.

Tanto la gestora como cualquier vehículo de esta dispondrá de la etiqueta SBIC (Sociedad de Beneficio e Interés Común), modalidad societaria que fue incluida en la ley crea y crece aprobada en 2022 y a la que se adscriben empresas que "voluntariamente se comprometen a tener impacto social y lo incluyen en sus estatutos", aclara la directora general de la gestora y consejera de la socimi, que apunta también que el objetivo es reinvertir el 50% de los beneficios que se obtengan en desarrollar más producto y mejorar el existente dentro de los límites que permite la regulación fiscal de estas sociedades cotizadas de inversión inmobiliaria que obligan a repartir del 80% de las ganancias en dividendos.

Una parte del retorno será social, en lo que en el argot se conoce como SROI (social return of investing o retorno social sobre la inversión), que será "medible y monitoreable". Las viviendas bajo el paraguas de Alas estarán ocupadas por individuos y familias con recursos medios y bajos en riesgo de caer en situación de vulnerabilidad o exclusión residencial. Hasta el momento, en España existen solamente dos socimis sociales que tienen el foco puesto en proveer de una casa a personas en situación de sinhogarismo, Primero H y tuTecho. Sin embargo, no existía ningún vehículo de lucro limitado que alquile a capas sociales algo superiores. Aunque este tipo de estructuras son novedosas, ya cuentan con una enorme tradición en otros países, como Reino Unido, donde una decena de housing associations gestionan cada una miles de inmuebles.